Música, danza, ceremonias
Los íberos tocaban diferentes instrumentos musicales: aulos o flautas, panderos y arpas, que usaban en las ceremonias y festividades, algunas tristes (funerales) y otras alegres (bodas, ceremonias religiosas….) En estos acontecimientos el poblado se reunía para bailar, cantar, tocar instrumentos, comer, etc.
Algunas festividades importantes eran las que celebraban el solsticio de verano, (21 de junio), la noche más corta del año, que señala el paso de la primavera al verano y el solsticio de invierno, (21 de diciembre), la noche más larga del año, y que marca el paso del otoño al invierno.
Para celebrar el solsticio de verano, bailaban durante toda la noche alrededor de una hoguera, como hoy hacemos para celebrar la noche de San Juan y en el solsticio de invierno se reunían las familias alrededor de un árbol, como hoy hacemos en Navidad. Esto nos ha llamado mucho la atención porque eso quiere decir que las fiestas cristianas tienen un origen mucho más antiguo, ¡¡nada menos que la prehistoria!!
La información que tenemos sobre estas fiestas se ha encontrado en los restos de cerámica donde aparecen representaciones de ceremonias y fiestas en las que participaban tanto hombres como mujeres. Como decíamos, resulta muy interesante el estudio de cerámicas, porque las danzas están muy presentes en ella. Hombres y mujeres danzan cogidos de la mano al son de la música.
Muy curioso también es que en la guerra, usaban instrumentos graves, como la trompa, para asustar a los enemigos.
En el “Vaso de los guerreros" aparecen pintadas figuras de soldados y músicos. Todos llevan máscara como símbolo de su participación en una ceremonia colectiva, puede ser una escena funeraria o una danza-lucha en honor de algún antepasado.
La música íbera es monocorde,es decir repite una misma nota, y utiliza sobre todo dos instrumentos:
- La doble flauta, de origen mediterráneo.
- La lira, también de origen mediterráneo
¡¡Y esto es todo!!